El ex intendente Carlos Torres y su visión sobre los diez años de gobierno kirchnerista.
«Una vez más se pretende instalar, con una mirada de la Argentina en blanco o negro, un nuevo slogan que divide aguas: la década ganada…La simplificación sólo en tres palabras del accionar de un gobierno durante 10 años, es un reduccionismo que indudablemente apunta a un único objetivo, sólo hablar de lo positivo.
El intento por imponer que desde 2003 sucedieron sólo cosas buenas en el país, y más aún, que esas cosas fueron producto del acccionar de los únicos que se atrevieron a transformar la realidad, es desconocer todo lo precedente como si antes del 25 de Mayo de aquel año sólo hubiesen existido dirigentes al servicio de los intereses corporativos y de los monopolios. Es el mismo reduccionismo que pretende vestir con el mismo ropaje a toda la oposición, colocándola en el casillero de “la derecha conservadora” .
Este claro escenario que muestra a dos Argentinas enfrentadas como en un ring, en donde sólo habrá un ganador, es el que quiere el Gobierno nacional, es el que más le ha servido, por ejemplo, para fracturar a la C.G.T. y a algunos gremios, a la prensa, al propio Partido Justicialista y hasta a los propios ciudadanos que creen ya, que solo es posible hablar de una gestión de gobierno en términos de pérdidas o ganancias.
Este estilo que como un gran escudo defensivo, utiliza el ataque permanente, requiere de las “espadas” disponibles que, siempre listas, explican todo y mucho más. (si el ex-presidente Kirchner se levantara de la tumba para reconocer los errores cometidos, algunos saldrían a desmentirlo!!)
Hasta el más simple habitante, comprende que en 10 años, se hicieron cosas buenas y cosas malas, que se tomaron decisiones acertadísimas, reivindicatorias y otras groseramente equivocadas. Nadie puede dejar de reconocer que se trabajó y mejoró en la defensa de los derechos humanos, realzando la histórica lucha de madres y abuelas de Plaza de Mayo, o que se instaló con decisión la recuperación del Estado como garante de derechos para los ciudadanos (la Asignacion Universal por Hijo es uno de los ejemplos ).
También es innegable que desde la Nación se violentó el federalismo de los recursos, generando una centralidad asfixiante para algunas provincias y en especial para la de Santa Fe; y que se intentó avanzar sobre el Poder Judicial avasallando la independencia de los jueces.
Se abre además un enorme interrogante para el futuro respecto de los gravísimos hechos de corrupción denunciados.
Desde nuestra mirada, creemos que no todo es blanco o negro y que es posible construir una alternativa que proteja los logros y corrija los desaciertos. Una alternativa nacional y popular, progresista sin corrupción, con diálogo, con el esfuerzo que significa la búsqueda del consenso, sin agresividad y sin estigmatizaciones que sólo dividen entre buenos y malos.
No hay década ganada. Tampoco perdida. Hay un gobierno que, según nuestro criterio, con un sesgo marcadamente populista, tuvo logros y gobernó durante diez años sustentando su accionar en el manejo de los recursos como disciplinador de dirigentes y que, necesariamente, requiere de una alternativa superadora que modifique cada uno de los aspectos negativos que, cada día, son más difíciles de ocultar».
Dr. Carlos Torres
ex–Intendente de Firmat
Foto: Lisandro Carrobé.