El próximo 18 de noviembre se cumplen dos años del sangriento homicidio de Mario D´Angelo y Graciela Picech, la joven pareja asesinada brutalmente en el interior de su domicilio ubicado en la esquina de Aristóbulo del Valle y Juan Manuel de Rosas.

A casi 24 meses del hecho que conmovió a la ciudad, Firmat24 se comunicó con familiares de las víctimas para saber qué novedades hay en la investigación. En ese sentido, la fuente consultada manifestó su “impotencia” y “enojo” ante la falta de respuestas de la justicia.

“No puedo entender que sigan diciéndome que hasta que no encuentren una punta, no pueden encontrar quién mató a Gra y Mario, o sea excusas” expresó.

El 18 de noviembre de 2015, Mario y Graciela fueron encontrados en el interior de su casa situada a pocos metros de la entrada principal del Cementerio municipal.

Según las primeras investigaciones, ambos recibieron la muerte tras ser atacados con un arma blanca y en el domicilio no se encontraron puertas forzadas.  La escena fue descubierta por un familiar de la mujer.

Ya en las primeras horas, se descartaron dos hipótesis. La primera que indicaba que podría tratarse de un homicidio seguido de suicidio, el cual fue rechazado entre otras cosas porque no se secuestró el arma utilizada. La otra hipótesis que fue descartada es que los sucesos se hayan dado en el marco de un robo. Esto último, debido a que en el lugar se encontró “una suma de dinero bastante considerable y elementos de cierto valor económico tales como máquinas de sacar fotos, celulares y bijouterie, entre otros”.

“Las víctimas murieron a raíz de las heridas cortopunzantes que recibieron en la zona del cuello. Los cadáveres tienen golpes de puño y heridas de arma blanca en ambos manos, lo que indica que intentaron defenderse. Por otra parte fueron asesinadas de la misma manera y las huellas marcadas en el piso son de una sola persona, todo lo cual podría estaría indicando que el crimen habría sido cometido por una sola persona” explicó en su momento el fiscal a cargo de la investigación, Matías Merlo.

Dos días después, se realizaron dos allanamientos a pocas cuadras de la casa de Juan Manuel de Rosas y Aristóbulo del Valle.

Luego de dos meses, un familiar directo de uno de los integrantes del matrimonio fue amenazado en forma telefónica.

A raíz del hecho, se inició una investigación que incluyó tres allanamientos (uno en Firmat y dos en Venado Tuerto) y una audiencia imputativa en la que un masculino -oriundo de Venado Tuerto- fue imputado por el cargo de “Amenazas”.

En este sentido,  Merlo indicó:“se secuestraron varios teléfonos, entre ellos el del cual partió la amenaza y, por el momento, no hay una vinculación directa con el homicidio”.

En marzo de 2016, unas 60 personas marcharon por calles firmatenses pidiendo justicia.  La comitiva -encabezada por los padres de Mario y Graciela- partió desde la casa donde ocurrió el trágico suceso. Desde allí, se dirigió por calle Libertad hasta Solís, para luego tomar San Martín y culminar en la esquina de Entre Ríos, donde se encuentra la Comisaría Cuarta.

Al cumplirse el primer aniversario, familiares y amigos llevaron adelante un breve y sentido acto en la casa donde ocurrió el hecho.

La actividad contó con la presencia de una veintena de personas que se acercaron para elevar una oración y encender una vela en su memoria.

Allí, el sacerdote Hernán Carletta bendijo el inmueble y a todos los presentes y expresó unas sentidas palabras. Inundados por el dolor y la emoción, los hermanos de Mario y Graciela agradecieron a quienes se acercaron para compartir tan triste momento.

“Todo determina que participó una sola persona y lograr esta evidencia es irrefutable” manifestó el fiscal en noviembre del año pasado cuando fue consultado por este medio.

“La circunstancia difícil es que, por más que le demos vuelta, nos falta la causa, el motivo, que es importante para nosotros y que no podemos desentrañar” expresó y cerró: “se encamina pero necesitamos individualizar correctamente al autor y estamos trabajando sobre el motivo para que los familiares tengan una respuesta y hacer tranquilos su duelo”.

Dos años después, la investigación aún no produjo ninguna detención.