Este jueves por la mañana, el Concejo fue escenario de lo que se estima será la última sesión ordinaria presidida por el edil Franco Stampone. Ya que, de no mediar cambios, el próximo encuentro sería con la nueva composición de ediles que asumirán sus bancas en pocos días.

La sesión comenzó con un intenso debate entre oficialismo y oposición por el pedido que hicieron los concejales del Frente Progresista para que se trate sobre tablas el expediente que habilita al Municipio a recibir un subsidio de 2 millones de pesos para la finalización de la construcción de la segunda planta reguladora de gas.

La solicitud del tratamiento sobre tablas es una herramienta legislativa que permite aprobar un proyecto en la misma sesión en la que ingresó, sin girarlo a comisión. Para que eso suceda, se debe contar con la mayoría de los votos. En caso, contrario, se pasa a comisión y se trata con los mismos tiempos que cualquier otro tema.

El requerimiento no fue aceptado por los concejales opositores (Stampone, Bellón, Rufine y Beltramo) lo que desató un fuerte debate que se extendió por más de una hora y que fue presenciado por miembros del Gabinete municipal y un grupo de vecinos que actualmente no poseen el servicio de gas natural.

La concejal Peotta fue la encargada de abrir el debate explicando que «la plata está disponible» y llegaría en los próximos días a la ciudad, siempre y cuando el legislativo apruebe la ordenanza que le permita al Municipio recibir dichos fondos provinciales.

«Ustedes quieren que venga el próximo gobernador a entregar el dinero» disparó la concejal quien hizo dos peticiones para lograr la aprobación del expediente en el transcurso de este día: realizar una comisión al finalizar la sesión y luego una sesión extraordinaria o bien convertir la actual sesión en una comisión. Ambas fueron desestimadas por la mayoría de sus pares.

Tras un desordenado intercambio de opiniones, finalmente el expediente fue pasado a comisión. En este punto, los concejales de la oposición aseguraron que existe voluntad de aprobarlo en un breve lapso siempre y cuando puedan estudiarlo con precisión.

«Queremos que la obra se haga y por eso pedimos un tratamiento responsable» expresó Bellón.

«No somos villanos que queremos perjudicar a nadie. Somos responsables y queremos estudiarlo seriamente. Es un compromiso que muy pronto le vamos a dar tratamiento» dijo Beltramo quien opinó: «hay intencionalidad de confundir a los vecinos porque la nueva planta no va a generar nuevas conexiones porque para eso hace falta la construcción del gasoducto».