El Partido Demócrata Progresista renovó autoridades en la provincia de Santa Fe. El encuentro se desarrolló en la sesión ordinaria de julio, de la Junta Ejecutiva Provincial, en la sede partidaria ubicada en calle Entre Ríos 1443, en la ciudad de Rosario.
Además de tratar temas referentes al centenario del Partido, que se cumplirá en diciembre de este año y de los análisis respecto de la situación política en nuestro país y la provincia, se conformó la nueva Junta, donde está representado todo el territorio santafesino, para el período 2014 – 2016. A continuación se detalla:
Como Secretario General Gabriel Real (General López), Tesorero Alejandro Blazicevic (Las Colonias), Ma. Florencia Barcarolo (San Justo). Vocales Titulares: Pablo Cardinale (Constitución), Horacio Bertoglio (Castellanos), Raquel Pereira (La Capital), Aldo Pedro Poy (Rosario), Roberto Battistini (iriondo), María del Cármen Sarú (Las Colonias), Héctor Brachetta (Rosario), Alex Sabattini (Rosario), Silvia Rocha (General López), Roberto Cerutti (San Cristóbal)y Lucrecia Larrondo (Rosario).
La Junta Ejecutiva Provincial emitió una declaración que compartimos a continuación: “Al cumplir sus 100 años de presencia en la vida política argentina, el Partido Demócrata Progresista reafirma los principios que el gran visionario que fue su fundador, Lisandro de la Torre, imprimiera como objetivo de su creación. Hace años, existía una Nación en el fin del mundo, que sobre la base del trabajo, la libertad, la justicia y el respeto a las leyes, llegó a ser importante y refugio para todos los hombres del mundo que quisiera habitar su suelo. Las enseñanzas de
Lisandro de la Torre y otros preclaros argentinos, como Leandro Alem, Lucio V. Mansilla, Juan B. Justo posibilitaron el surgimiento de una nueva y gloriosa Nación. Hoy, cuando vemos a nuestro país ante una disyuntiva histórica nacida del fracaso de los sucesivos gobiernos que han intentado reformas que siempre han redundado en nuevas frustraciones, no podemos sino poner de manifiesto nuestro convencimiento que detrás de buenas intenciones, se proponen ideas poco eficaces, que en la mayoría de los casos colisionan con valores y principios profundamente arraigados en el ideario de nuestro fundador. Existe una clara confusión entre lo público y lo estatal y entre el bien común y el Estado. Lo público, incluye pero trasciende lo estatal, e incorpora como parte esencial a las personas, las familias y toda la sociedad civil. Frente a ello, pregonamos con Lisandro de la Torre, que toda sociedad para alcanzar el desarrollo y realización material y espiritual de todos sus miembros, debe promover y compatibilizar tres grandes valores y objetivos: la libertad, la justicia y el progreso. Un Estado excesivamente poderoso y discrecional, invade todos los ámbitos del quehacer humano y tiene el costo de limitar la libertad y oportunidades de las personas y la sociedad civil. El costo de esta ideología, ya la estamos soportando los argentinos y se manifiesta en pérdida de la capacidad del crecimiento y creación de empleos, estancamiento en los salarios, debilitamiento de la capacidad de innovación y emprendimientos y retrocesos en materia de inversión y productividad. En síntesis, menos libertad, menos justicia y menos progreso. Hoy, 100 años después de la fundación de este viejo Partido, se debe volver a los principios que lo orientaron, es decir, la libertad, la justicia y el progreso”.
