Mediante un escrito remitido a los medios de comunicación, Apropol (Asociación Profesional de Policías) aseguró que, en su informe médico,  los forenses del Poder Judicial descartaron el uso de picana eléctrica en la causa por la que se encuentran detenidos seis efectivos policiales de la Comisaría 13°, entre ellos su máximo responsable.

Según la misma fuente, en las próximas horas, los abogados de la institución pedirán la recalificación de la causa lo que podría determinar la inmediata libertad de los detenidos.

Según el relato de A. Meyer, el hecho habría ocurrido el último sábado de junio, luego que uniformados abordaran al joven en la vía pública.

Ya en dependencia policial, el denunciante habría sido obligado a quitarse la ropa y sometido a diversas torturas hasta que habría logrado huir saltando desde el patio por el tapial a una casa lindera, desde donde habría podido contactarse con su familia.

El caso tomó estado público luego que el joven mostrara ante las cámaras de TDC, las marcas que quedaron en su cuerpo.

En este tiempo, diferentes agrupaciones sociales y políticas repudiaron el hecho que se investiga y se realizó una conferencia de prensa pública por una seguridad democrática, en la que la denuncia fue el tema central.