
El lunes 19, a sólo tres días de que la Municipalidad abriera finalmente la calle Pueyrredón entre los boulevares Solís y Colón, dando cumplimiento a un pedido histórico de un vasto sector de firmatenses, personal de Nuevo Central Argentino (NCA) llegó a la ciudad para impedir el paso de los vehículos.
La inesperada situación provocó la reacción de las autoridades locales quienes se comunicaron en forma telefónica con el ingeniero de la firma con quien se había trabajado el tema. El resultado fue el retiro de los empleados, el restablecimiento del tránsito vehicular y el compromiso de que, en el transcurso de esta semana, el NCA estaría enviando la documentación pertinente a la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) quien debe dar el visto bueno final y que, según indicaron funcionarios locales, adelantó que estaría habilitando la obra.
Por lo tanto, la legalidad del paso a nivel sería confirmada en los próximos días.
“Cumplimos con todo lo que había que hacer e incluso fuimos por más presentando todo para habilitar los paso a nivel que están en forma irregular” explicó Pascual quien recordó que, en la actualidad, sólo están habilitados los pasos de calles Alberdi y Libertad.
El funcionario además destacó la importancia de que la obra cuente con el aval de la gente y el cambio que propició la apertura de todos los pasos a nivel que hay, más allá de que hayan sido abiertos en forma regular o irregular.
“Esto no fue una ocurrencia de una secretaría sino un pedido de la gente. Este es un proyecto que nació de la gente en el Plan Urbano Ambiental. Luego en el Presupuesto Participativo volvió a salir como el más votado de la región 2” contó y opinó: “la apertura de los paso a niveles cambió un 100% la urbanística de la ciudad. Fueron medidas importantísimas que dieron un vuelco a la relación de las partes de la ciudad. Hoy prácticamente ya no existe el detrás de la vía”.