El senador provincial, Lisandro Enrico, dio a conocer a los vecinos del Departamento Gral. López, que el próximo miércoles 14 se llevará a cabo la Audiencia Pública sobre el traslado de la Alcaidía de Melincué. La finalidad del encuentro es que distintos representantes del sur santafesino, y especialmente de la localidad, se informen sobre el proyecto del legislador que aspira a construir una nueva Unidad Penitenciaria a tres kilómetros de la localidad y quitarla definitivamente del centro urbano.

La audiencia se realizará a las 16:30 hs., en la Escuela de Nº 425 «Pablo Pizzurno» (calle Laprida 75). Estará coordinada por representantes del Ministerio de Gobierno y Reforma del Estado de la Provincia de Santa Fe. A su vez, contará con la presencia del ministro de Gobierno, Pablo Farías; el ministro de Obras Públicas, Julio Schneider; y el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro.

Distintos vecinos de la zona tramitaron sus acreditaciones para asistir a la reunión pública. Los registros de participación estuvieron en la Comisaria Primera de Melincué y el Nodo V de Venado Tuerto. Inclusive, los interesados en asistir recibieron un documento con las bases y fundamentos del proyecto en debate. Independientemente si la participación de cada persona será con uso de la palabra, en carácter de exposición, o simplemente presencial, se exigirá la inscripción previa.

Al respecto, Enrico comentó: “Esta audiencia informará a los vecinos de toda la región sobre el nuevo proyecto,  comprenderán su importancia.La alcaldía de Melincué no puede seguir adelante en la ubicación actual  y funcionando con el pésimo estado de su edificio. Necesitamos una nueva unidad penitenciaria  en las afueras de la localidad; más amplia, restructurada  y segura.”.

Además, el senador dejó en claro que en la creación del proyecto solicitó el mayor cuidado ambiental y turístico: “Su planificación fue compleja y prudente en diversos puntos. Durante la elaboración efectué pedidos especiales a la dirección de Proyectos del Ministerio de Obras santafesino, a efectos de que se tengan en cuenta dos aspectos importantes para el desarrollo de la localidad; la preservación del medio ambiente y del desarrollo turístico”.

La nueva Alcaidía de Melincué

Hace dos años, el senador provincial Lisandro Enrico, gestiona la construcción de la nueva Alcaidía en Melincué, con el propósito de trasladar el actual edificio a tres kilómetros del casco urbano sobre la Ruta 93. Este proyecto hace tiempo fue aprobado por las dos cámaras del Poder Legislativo y se encamina a la etapa de ejecución. La obra demandará una inversión cercana a los $240 millones.

En un predio de diez hectáreas, las nuevas instalaciones ofrecerán cuatro pabellones de 40 celdas cada uno, lo que permitirá albergar a 160 detenidos. Desde la planificación se han predeterminado sectores específicos: estacionamiento, accesos, parada de ómnibus y un centro de salud. Este complejo contará con dos sectores diferenciados denominados “intramuros” y “extramuros”.

Cuando el lugar comience con sus tareas, se incrementará el número de puestos de trabajo. Aproximadamente 100 personas prestarán servicios para optimizar el funcionamiento de la Alcaidía. Entre ellos, 80 agentes penitenciarios, personal con otro tipo de formación laboral, que permitirá  tener policías en las calles abocados a tareas de prevención y no custodiando presos.

“Es una obra civil importante y por la necesidad que tenemos como sociedad, debemos tener más espacio para alojamiento de presos, condenados o procesados. El edificio vigente, ubicado en el centro del pueblo ya no tiene más capacidad operativa, hay más de 100 reclusos entre los condenados y procesados. El inmueble está en condiciones deplorables, no cubre las expectativas y tras 80 años debe ser desarmado para pensar en la construcción de una nueva Alcaidía, que pueda contener a los detenidos de las comisarías regionales”, informó Enrico.

En este sentido, el legislador agregó: “Quienes delinquen deben estar presos, pero tiene que ser en un marco de seguridad y resociabilización, no en lo que es hoy Melincué: un edificio de ocho décadas totalmente inseguro para los internos y la propia comunidad”.