Un niño de 11 años murió por el disparo de una escopeta que manipulaba su hermanito de 8.  Fue en el campo donde trabaja el papá de ambos.

La tragedia ocurrió en un campo cercano a la localidad de La Chispa, a 15 kilómetros de Murphy, el domingo al mediodía. Los chicos jugaban en una habitación mientras el padre realizaba tareas rurales cuando la escopeta se disparó accidentalmente.

El accidente doméstico ocurrió en la zona rural de Godeken, en una estancia en la que el padre de ambos chiquitos realiza tareas rurales quien este domingo había ido a su trabajo acompañado por dos de los seis hijos que tiene cuando se desencadenó la tragedia.

En horas del mediodía, el hombre realizaba tareas rurales cuando sintió un estampido proveniente de una habitación de la estancia en la que trabajaba.

Al llegar a ella comprobó que el niño de 11 años, Luciano L., yacía con un escopetazo en el tórax, mientras que su hermano, presa de los nervios, no podía comprender lo sucedido. Al parecer una escopeta calibre 16 se había disparado accidentalmente manipulada por el más pequeño de los chicos.

El padre buscó inmediatamente atención médica, primero en La Chispa, luego en Murphy y finalmente en Venado Tuerto, adonde el pequeño llegó ya sin vida.