En una conferencia de prensa que tuvo lugar la semana pasada en el local de Red Solidaria Firmat, la senadora nacional por Santa Fe, María de los Ángeles Sacnun, habló sobre la realidad económica y productiva que atraviesa el país. En ese marco, hizo hincapié en la labor legislativa que desarrolla desde su banca opositora y planteó su visión acerca de los principales lineamientos que lleva adelante el gobierno de Mauricio Macri en materia de política económica.

«Tenemos la obligación de acompañar al conjunto de la población en esta situación que está atravesando. De hecho hemos acompañado a la Multisectorial de Rosario que hizo una presentación judicial en los Tribunales provinciales que lamentablemente fue rechazada pero que fue apelada y esperamos que la Cámara de Apelaciones tenga otra mirada respecto al tema en la medida en que vemos que hay mucha preocupación, mucho desazón en muchos vecinos que en su momento confiaron en el gobierno de Cambiemos, que votaron de buena fe a Mauricio Macri creyendo que se iba a producir un  cambio positivo, que lo que se planteaba en términos políticos como ejes de campaña como pobreza cero y avance en inversiones en materia privada para generar más productividad  iban a generar una mejor calidad de vida y hoy se encuentran, muy el contrario, con que sus derechos han sido avasallados, que en lugar de avanzar en una conquista o ampliación de derechos, se está retrocediendo» expresó.

Además del acompañamiento desde el punto de vista judicial para hacer frente a la realidad argentina, Sacnun se refirió al trabajo desde su rol como senadora nacional.

«En la Cámara de Senadores estamos trabajando con distintas comisiones. Creemos que el haber soslayado las audiencias públicas en materia de aumento de tarifas constituye un avasallamiento a los derechos que reconoce la Constitución. Las pequeñas y medianas industrias  y comercios y productores están siendo afectados notablemente y, en muchos casos, están pensando en prescindir de personal para hacer frente a los costos fijos de sus emprendimientos económicos» planteó y agregó: «ante esta situación, estamos evaluando las distintas alternativas que existen para poner freno a este tarifazo. De hecho, el ministro Aranguren estuvo hace pocos días en el Senado y no satisfizo a la mayoría de los legisladores en lo que contestó al plantear que están aprendiendo sobre la marcha. Me pareció una frase muy poco feliz porque, en un momento donde las familias están con una tremenda zozobra para afrontar el pago fe este tarifazo, que nos digan que están aprendiendo sobre la marcha la verdad que constituye cuanto menos una falta de respeto al conjunto de los argentinos».

Respecto a la vía judicial a la que ingresó el tema de los tarifazos y su posible resolución, la legisladora nacional opinó: «estamos escuchando algunos planteos de per saltum para que sea la Corte Suprema de Justicia de la Nación la que finalmente trate estas cuestiones. Esperamos que el Poder Judicial no avale este tremendo tarifazo porque seria convalidar un acto de absoluta injusticia que está reñido con principios que no sólo establece la Constitución Nacional sino con convenciones internacionales de raigambre constitucional que amparan los derechos de los ciudadanos. Esperamos que el Poder Judicial esté a la altura de las circunstancias y decir también que, cuando se habla del tema subsidios y viendo como se estigmatizaba a aquellos que recibían algún tipo de programa social que constituía parte de un subsidio nacional para incluir, para dar oportunidades, había sectores que lo veían como algo negativo que tenia que ver con ir en contra de la cultura del trabajo. Y  hoy nos damos cuenta que cuando hay un Estado presente, el subsidio se utiliza como una herramienta de política económica a los fines de dinamizar la economía y que los subsidios llegaban a todos los sectores económicos y sociales de la Argentina. Los sectores medios han sido los grandes beneficiados de estos subsidios en materia de energía, de tarifa eléctrica, de gas y transporte público porque ésta era una forma de generar capacidad de ahorro en los sectores medios y que ese ahorro se pudiera volcar al consumo local, donde trabajaba el comerciante, trabajaba el industrial porque había una mirada en fortalecer el mercado interno».

«Las políticas de subsidio no beneficiaban sólo a los más pobres o excluidos sino que eran el eje central  a la hora de tener un Estado que intervenía directamente en la economía para sostener el mercado interno, el comercio y la industria local» remarcó.

Sobre los lineamientos del actual gobierno nacional, Sacnun indicó: «la primer estrategia que advertimos de este gobierno y que la veníamos planteando desde hace tiempo es la de generar un 15% de desocupación a los fines de bajar lo que ellos llaman el costo laboral para bajar el costo laboral en la región u y hacer competitivos los productos de algunos sectores de la encomia concentrada y no de la pequeña y mediana industria que ha sido la gran dadora de trabajo en la última década porque quieren que exista un porcentaje importante de desocupación a los fines de que, habiendo tanta gente en el mercado laboral buscando trabajo, se genere justamente una baja en ese costo y eso acompañado por una flexibilización laboral lo cual genera, en primer lugar, una situación muy endeble desde el punto de vista de los trabajadores pero también una situación muy complicada a la hora de buscar trabajo, aceptando cualquier situación ante la posibilidad de que te lo nieguen».

«Eso encuadra con la Alianza del Pacífico, con la apertura de las importaciones que se ha  comenzado a dar desde el 10 de diciembre, lo cual evidencia que hay una mirada distinta a la hora de integrarse como ellos llaman al mundo. Cuando decían que no estábamos integrados al mundo era porque cuidábamos el mercado interno, protegíamos a la industria nacional» acotó y cerró: «vemos que la lluvia de dólares que habían prometido en vez de entrar por la puerta comercial para generar desarrollo  y empleo, entra y sale por la puerta financiera».